Una Tecnica Para Saber Si Avanzas O Te Has Perdido En Tu Vida.
Es un hecho indiscutible que vivimos en tiempos locos, rápidos y sobrecargados de asuntos y tareas por resolver. El tiempo se está volviendo un bien escurridizo, nos faltan horas, los días pasan rápido y muchas personas tienen la sensación de no avanzar hacia ninguna parte en este tornado psicótico de prisas.
En estas circunstancias se hace evidente la necesidad de contar con un método que nos permita evaluar si vamos en la dirección deseada o si por el contrario nos hemos perdido y vamos por ahí sin rumbo fijo.
La técnica que yo utilizo y a la que he denominado Paquetes de tiempo, consiste en algo muy sencillo.
Cada X tiempo, en mi caso cada 3 meses, realizo una evaluación en profundidad de mi vida. Por ejemplo, el 11 de febrero, el 11 de mayo, el 11 de agosto y el 11 de noviembre (estos son mis paquetes de tiempo, tengo 4 y cada uno consta de 3 meses).
Estos 4 días al año, que mencionaba más arriba, están bien remarcados en mi agenda y sé de antemano que parte de ese día será dedicado al análisis de mi recorrido vital de los últimos 3 meses, asique, no tengo que estar pensando en cuándo me toca hacer revisión. Este es el aspecto que tiene mi calendario.
Lo que hago en mi día de revisión es ir a mi cafetería favorita con un cuaderno específico, únicamente dedicado a esta tarea y en un primer momento simplemente reflexiono sobre los distintos aspectos de mi vida (trabajo, estudios, familia, amistades, pareja, ocio, etc...) y voy anotando ideas en mi cuaderno sobre aquellas cosas que deseo mejorar. Estas anotaciones son simples esbozos, no es necesario elaborarlas en profundidad.
Evalúo las pequeñas y grandes decisiones que he tomado, cómo me ha ido en cada aspecto de mi vida, qué creo que he hecho regular o mal y qué he hecho bien, y así durante un rato (por lo menos media hora para revisar 3 meses de vida, si es más de media hora mejor), sin distracciones y tomando apuntes en la libreta.
Las personas tenemos distintos intereses, diferentes prioridades y metas, por lo tanto, puede ser que alguien de más importancia a aspectos intelectuales, otro a asuntos materiales y un tercero a cuestiones espirituales por ejemplo, o a todos ellos a la vez, por eso, este trabajo es muy individual. Cada uno ha de marcar sus propios deseos y objetivos.
Lo importante aquí es escoger al menos 2 aspecto de cada categoría para mejorarlos en los próximos tres meses. Por ejemplo:
En una hoja en blanco y fechada anoto aquellas cosas que he decidido que mejoraré basándome en el análisis que he realizado de los 3 meses anterior, así tengo un mapa de ruta, no suelo hacerlo muy ambicioso porque si no probablemente no sería capaz de cumplirlo, pero aquí cada uno es libre de decidir sobre aquellas cosas que le gustaría introducir, mejorar o incluso eliminar de su propia vida.
De esta manera, un día a la semana releo mis objetivos o deseos con el único fin de no perderlos de vista. Si le proporcionas esta información a tu cerebro, él se encargará de recordarte, en ciertas ocasiones, que tienes objetivos por cumplir y que no te acomodes.
Como es obvio, esta sencilla técnica no te quitará nada de tiempo, pero sí te servirá de algún modo como guía para no andar perdido y sin saber por cuál asunto empezar primero. Es más, deberías idear tu propia técnica que te sirva para asegurarte de que estas caminando hacia algún lugar que te interesa y no hacia cualquier parte.
Está demostrado que las personas que no organizan sus objetivos, que no marcan etapas para su propia evolución y que no construyen su vida bajo sus propios criterios, tienden a estar más deprimidas, perdidas y ansiosas que aquellas que sí lo hacen. Realmente si ideas una técnica creativa, que te quite poco tiempo, pero que te aporte estabilidad y una guía práctica y sencilla, es muy posible que notes cambios rápidos no solo en aquellas cosas que has decidido mejorar sino también en tu estado anímico, ya que hay pocas cosas más gratificantes que sentir que uno tiene el control sobre su propia vida.
Salu2. =)
